Durante los últimos 2 años y medio de epidemia, 20 de las 34 cerdas gestantes investigadas fueron serológicamente positivas mientras que no se detectó ni el virus ni el RNA viral en ninguno de los órganos procedentes de las cerdas o de su progenie. Esto indica que los jabatos infectados de forma persistente por la transmisión transplacental del virus no desempeñan un papel crucial en el perpetuación de la enfermedad entre la población de jabalíes.
V. Kaden, H. Steyer, J. Schnabel and W. Bruer. Classical Swine Fever (CSF) in Wild Boar: the Role of the Transplacental Infection in the Perpetuation of CSF. Journal of Veterinary Medicine Series B. 2005. Vol. 52: 161.