En el primer experimento, 18 cerdos fueron alimentados entre los 26,0 y los 109,4 kg con tres dietas distintas: control, 6% de HPB (sustituyendo la proteína de la harina de soja) y 12% de HPB (sustituyendo la proteína de la harina de soja). Durante la primera fase del estudio el crecimiento y el IC se resintieron negativamente de la inclusión de HPB (p<0,01) pero durante el acabado o en el global del estudio no se detectaron diferencias.
En el segundo experimento 48 cerdos entre 11,4 y 107,2kg de PV fueron usados para estudiar el efecto de incluir 0, 5, 10 o 15% de HPB en las dietas desde el destete (34,5 días) hasta el sacrificio. El crecimiento y el IC fueron peores entre el destete y 5 semanas después cuando se incorporaba HPB en las dietas (p<0,03). También se apreciaron diferencias en la calidad de la canal, mayor firmeza de la grasa dorsal y menos porcentaje de magro (p<0,05).
Esta proteína bacteriana puede utilizarse hasta un 12% de inclusión a partir de los 26 kg de PV sin efectos negativos en el global del periodo de engorde.
M. Overland, NP Kjos y A. Skrede 2004. Italian Journal of Animal Science 3(4):323-336