Los resultados obtenidos mostraron que la reducción en un 3% en el nivel de PB de la dieta si bien no redujo los olores ni la concentración de gases con efecto invernadero, si permitió reducir de forma significativa las emisiones de amoníaco.
P.D. Le, A.J.A. Aarnink, A.W. Jongbloed. Odour and ammonia emission from pig manure as affected by dietary crude protein level. Livestock Science. 2009. Vol. 121 (2-3): 267-274.