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El experimento consistió en un diseño factorial con dos edades diferentes al destete (4 vs. 6 semanas de vida), dos niveles de proteína en la dieta (Alto; 230 g PB/kg vs. Bajo; 130 g PB/kg) y la infección experimental con Escherichia coli enterotoxigénica (+ vs. -). Adicionalmente se estudió el efecto de la fuente de proteína utilizada (leche descremada en polvo vs. harina de soja) y la inclusión de antibióticos promotores de crecimiento (si vs. no) en los animales infectados de ambas edades. Al destete (día 0), los lechones se asignaron a uno de los tratamientos experimentales durantes 2 semanas. El día 14 post-destete se administró la misma ración estándar de pienso a todos los animales hasta las 10 semanas de vida. A los 3 días post-destete, los lechones fueron inoculados con una concentración de 109 UFC de Escherichia coli enterotoxigénica.
La Escherichia coli enterotoxigénica presentó efectos perjudiciales sobre el crecimiento durante un corto espacio de tiempo, reduciendo el consumo (CMD) entre los días 3 y 6 (P<0,05) en ambos grupos de lechones, los destetados a las 4 o a las 6 semanas. Comparado con los animales no infectados, los animales inoculados destetados a las 4 semanas y alimentados con la dieta de alto contenido en proteína presentaron una mayor reducción del CMD inmediatamente posterior a la infección respecto a los alimentados con la dieta de bajo contenido proteico (42 y 25% respectivamente; P=0.088). Este efecto fue inferior en los lechones destetados a las 6 semanas, 26% y 19% para las dieta de alto contenido proteico respecto la de bajo contenido. Los animales alimentados con harina de soja, presentaron menor CMD y ganancia de peso (GMD) (P<0,001) durante los primeros 14 días respecto a los animales alimentados con leche descremada. La inclusión de antibióticos promotores de crecimiento en la dieta mejoraron la productividad de los lechones durante el periodo inmediatamente posterior a la infección; los animales infectados que consumieron antibióticos promotores de crecimiento crecieron considerablemente más que los que no los consumieron.
En conclusión, la infección experimental con Escherichia coli enterotoxigénica presenta mayor incidencia sobre la productividad de los lechones destetados a las 4 semanas que los destetados a la 6 semanas de vida. En ausencia de promotores del crecimiento, incrementar la edad al destete y reducir el nivel de proteína de la dieta puede ayudar a minimizar los efectos de la colibacilosis post-destete sobre los parámetros productivos, particularmente en condiciones desfavorables.
IJ Wellock, PD Fortomaris, JGM Houdijk and I Kyriazakis, 2008, Animal 2(6):825-833.
