Se realizaron dos experimentos. En el Exp. 1, se utilizaron 36 lechones (Landrace x Yorkshire x Duroc, 84,5±0,60 kg PV inicial) distribuidos en tres tratamientos experimentales con cuatro réplicas por tratamiento y tres lechones por tratamiento. La lecitina se añadió en substitución de la grasa animal (sebo) a 0, 2,5 o 5% de la dieta. En el Experimento 2 se utilizaron un total de 108 cerdos (85,0±0,76 kg PV inicial) siguiendo un diseño factorial de los tratamientos en 2 x 2, donde se utilizaron dos niveles de lecitina (bajo, 2,5% y alto, 5,0%) y dos de quitooligosacáridos (0 y 0,1%). En ambos experimentos, los lechones se alojaron en corrales mitad slat mitad pavimento de 2,5 m x 2,5 m y 3,0 m x 2,8 m para el exp. 1 y 2, respectivamente. Los animales disponían en cada corral de libre acceso al comedero y al bebedero.
La lecitina mejoró la ganancia media diaria (16%) y el índice de conversión, y no afectó la digestibilidad aparente de los nutrientes. A día 28, la lecitina redujo la concentración total de colesterol a nivel sérico así como la concentración de lipoproteínas de baja densidad en un 34 y 77%, respectivamente (P=0,016), aunque aumentó la concentración de triglicéridos (P=0,048). La lecitina no produjo ningún efecto sobre las características y la calidad de la carne, pero aumentó la concentración de ácido mirístico y alinolénico y redujo el palmitoleico en carne. La adición de quitooligosacáridos en la dieta que contenía lecitina, redujo los niveles de colesterol en la carne (16,4%) y los de ácido oleico (28,3%), y no afectó a los rendimientos productivos, la digestibilidad de los nutrientes, los metabolitos en sangre y la calidad de la carne.
Se puede concluir que la adición de lecitina en la dieta mejora los rendimientos productivos de los cerdos en fase de acabado y la inclusión de quitooligosacáridos reduce el contenido de colesterol de la carne.
WT Kim, P Shinde, and BJ Chae. 2008. Canadian Journal of Animal Sciecne. 88: 283-292.