Se observó como la conformación global de los aplomos tenía efectos sobre la longevidad de las cerdas en los análisis SG, BP y BF aumentado el riesgo a medida que empeoraban los aplomos. La supervivencia disminuía con la presencia de crecimiento anormal de las pezuñas y bultos o golpes en las extremidades en los análisis BP y BF mientras que el plantigradismo sólo reducía la supervivencia en BP y las extremidades en hiperextensión reducían la supervivencia en BF. La presencia de pies abiertos aumentaba el riesgo de fallida en el análisis SG. La conformación global de aplomos mostró un efecto significativo en la longevidad de las cerdas en el análisis SG, así como en los análisis BP y BF. Las cerdas con una mala conformación de aplomos pueden tener dificultades para acceder a recursos como la comida o el agua. Este hecho podría reducir su fertilidad y su capacidad de amamantar a los lechones
Las estimaciones de heredabilidad para la longevidad de las cerdas fueron de 0,07 (análisis SG), 0,02 (análisis BP) y 0,08 (análisis BF). Aunque parece factible una mejora genética directa de la longevidad de las cerdas, la respuesta esperada sería presumiblemente pequeña. Aún así, la selección indirecta a través de la conformación de aplomos o defectos específicos podría ser de utilidad dadas las heredabilidades moderadas-altas descritas en algunos trabajos.
X. Fernández de Sevilla, E. Fàbrega, J. Tibau, J. Casellas. Influencia genética y de los aplomos sobre la longevidad de cerdas Duroc. Acteon. Comunición Sevilla 2008.