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Después de un mes de agosto bastante estable en el norte de la UE, el mercado porcino europeo ha reiniciado un descenso en septiembre debido a la falta de demanda.

Septiembre será un mes bajista. Queda por ver a qué ritmo sucederán los descensos.

La relación "lechones más pesados - mejor supervivencia" no es tan simple como aparenta.

El mes de julio ha visto bajar el precio del cerdo cerca de 20 céntimos de euro en los países del norte de Europa, sin embargo el mes de agosto se inicia con signos de estabilidad.

El futuro pinta bien en cuánto a costes de las materias primas.

España está viviendo una paradoja: con una autosuficiencia estimada en un 160% está importando como casi nunca antes lo hizo. Esta situación es insostenible, el precio español y el alemán deben converger.

Hemos oído hablar mucho sobre optimización de la rentabilidad del cebo mediante la reducción de la desviación estándar del peso de mercado para conseguir un peso más homogéneo y más cercano al que proporciona un mayor beneficio. Es como cuando jugamos a los dardos, quieres agruparlos, pero también tienes que acercarte al centro de la diana.

La demanda flaquea sobre todo en Alemania. Los precios europeos han disminuido durante la primera mitad de este mes de julio.

El verdadero motivo de que el mercado esté tan estable son las grandes cosechas a nivel mundial.

La escasez de la oferta es la que tira del precio pero hay muchos otros factores en juego: flujo comercial multiproducto desde Dinamarca hacia EEUU, Rusia acaba de presentar una propuesta de apertura para algunos estados de la UE (entre ellos España), …

La tendencia marca un aumento de los precios en las semanas venideras. Sin embargo, la magnitud de este aumento estará determinado por la evolución de la meteorología.

Los pesos actuales están en los máximos históricos de toda la producción moderna. Deberíamos observar un gran descenso pronto pero...

Después de unos meses de cierta apatía el mercado de cereales se ha movido en todos los frentes en los últimos 10 días de mayo.

Si no intervienen factores sanitarios perturbadores este año será recordado como un ejercicio muy generoso.

Tras un mes de abril particularmente dinámico, la mayoría de los precios europeos se han mantenido estables durante este mes de mayo. La oferta ha continuado retraida pero la demanda se ha visto afectada por un clima menos favorable.

Las perspectivas de la cosecha no son malas, eso hace que el mercado esté en espera, sin tomar decisiones ni de compra ni de venta.

La próxima vez que alguien te hable durante la comida del valor de una décima de IC, a menos que te dibujen una distribución en la servilleta, contéstales que no te interesan los valores medios.

El precio español ganará posiciones hasta bien entrado el verano; la amplitud del incremento dependerá de Europa.

Mientras que la oferta sigue siendo baja en Europa, la demanda muestra dinamismo en este mes de abril. Las exportaciones a Asia se ven beneficiadas por los elevados precios del mercado porcino norteamericano. El consumo europeo también parece bueno, lo que ha impulsado los precios.

La eficiencia alimentaria medida como índice de conversión (IC) es, básicamente un concepto de ingeniería. Hay un montón de ideas falsas sobre la eficiencia alimentaria y todavía más sobre los aspectos económicos asociados.

Escenario abierto para los cereales. Esperamos corrección de precios para las nuevas cosechas de soja.

El futuro para los productores europeos aparece despejado y el quid de la cuestión radica en saber como se reposicionan los distintos mercados.

Cierta disminución en la oferta y la subida del precio en los Estados Unidos ha conllevado a un aumento de los precios del cerdo en varios países europeos.

El aumento de precio del cerdo comportará un descenso de la demanda para la gran mayoría de consumidores, tanto domésticos como de exportación. Esto es especialmente sensible en la actual situación de paro elevado que ha visto caer los ingresos desde el inicio de la crisis en 2007.