Es lógico suponer que cualquier factor que irrite o inflame el sistema respiratorio provoque la respuesta fisiológica de estornudar o toser, o ambas. Sin embargo, no todas las enfermedades de las vías respiratorias producen estos signos clínicos esperados. Por ejemplo, en los cerdos, la bronconeumonía crónica se observa con más frecuencia como una falta de crecimiento que como brotes de tos y dificultad respiratoria. Por lo tanto, la tos generalmente indica que cualquier agresión que la provoca se encuentra en sus etapas precoces.
A menos que se identifiquen los cerdos que se ven tosiendo por primera vez, la impresión durante la observación es que un determinado porcentaje de la población de cerdos afectados está siempre tosiendo. Esta proporción no estará necesariamente constituida por los mismos cerdos en cada observación ya que, a medida que pasa el tiempo, unos cerdos se recuperan mientras otros resultan afectados. El patrón de la tos puede, por lo tanto, facilitar una información que será de utilidad para realizar un diagnóstico.
Un brote de tos repentino y generalizado puede indicar una agresión medioambiental o bien la aparición súbita de un patógeno sumamente contagioso e infeccioso. Por otra parte, una tos constante en grupos de cerdos podría indicar un problema más antiguo. La tos es una importante reacción refleja de defensa cuyo fin es expulsar las secreciones inflamatorias y materiales extraños del tracto respiratorio. Si se suprime el mecanismo de toser por cualquier motivo, el sistema no se despeja de la infección y la situación se hace crónica. Aunque resulta alarmante y es indicadora de enfermedad, la tos es un signo de que se están produciendo respuestas fisiológicas normales y no debe considerarse aislada como algo malo.
Tabla 1. Agentes infecciosos patógenos que están asociados normalmente con la tos o la dificultad respiratoria en los cerdos (los más frecuentes y más importantes se muestran en negrita).
Bacterias
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Micoplasmas
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Virus
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Acinetobacter
Actinobacillus Arcanobacterium Bordetella Haemophilus Klebsiella Pasteurella Salmonella Streptococcus |
M. hyorhinis
M. hyopneumoniae |
Gripe porcina
PRRS Coronavirus respiratorio PCV2 Citomegalovirus porcino Enfermedad de Aujeszky Fiebre porcina clásica Fiebre porcina africana |
Además de los agentes patógenos, hay que tener en cuenta la existencia de otros factores que de vez en cuando pueden provocar tos en los cerdos (tabla 2).
Tabla 2. Otras causas de tos y/o disnea en cerdos
Parásitos
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Otras patologías
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Ambiente
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Ascaris
Metastrongylus Toxoplasma Chlamydia Pneumocystis |
Anemia
Insuficiencia cardiaca Síndrome de estrés porcino Hernia diafragmática |
Estrés por calor
Gases del estiércol Intoxicación por nitrato Polvo Endotoxinas bacterianas Esporas fúngicas Fumonisina |
La infección con Ascaris suum a menudo se encuentra asociada con la tos ya que provoca una inflamación eosinofílica del pulmón cuando en la tercera fase del ciclo vital la larva migra a través del tejido pulmonar. La migración de las larvas también puede actuar como un factor desencadenante de infecciones bacterianas que de otro modo estarían latentes.
Los cerdos anémicos pueden presentar dificultad respiratoria durante su lucha por compensar la falta de oxígeno producida por la reducción de glóbulos rojos circulantes y por tanto, de hemoglobina y serán también más propensos a la inhalación de materias extrañas que, a su vez, pueden provocar la tos. Si se produce insuficiencia cardiaca, las secreciones respiratorias se despejan del pulmón con más dificultad y se puede desarrollar una "tos cardiaca". Sin embargo, esto es más probable que esté asociado a cerdos concretos y de forma ocasional.
Son relativamente frecuentes las causas ambientales de la tos. Se han observado granjas donde se produce tos en cerdos de cebo pero con una patología visible tan reducida como para ser observada en el momento del sacrificio. En estas situaciones, una irritación grave de las vías aéreas, junto con la supresión de los mecanismos de defensa microscópicos del pulmón, dará lugar a la tos. Las causas más frecuentes de este efecto combinado son las condiciones de calor y el polvo. Otros contaminantes asociados con el polvo y transportados por el aire, como endotoxinas bacterianas y esporas de hongos, empeoran las cosas. Por lo tanto, el procedimiento para resolver el problema de los cerdos que tosen debe ser siempre multifactorial.