Con la de ayer son siete las sesiones de lonja que finalizan con el mismo resultado. El precio español está firmemente anclado en 1,30 € / kg vivo y no parece que se vaya a mover a corto plazo.
Debemos reconocer (y quitarnos el sombrero si lo llevamos) que los mataderos españoles dan sobradas muestras de una resiliencia extraordinaria; las diferencias de precio de los cerdos respecto a nuestros vecinos y competidores siguen igual que hace un mes; nuestro precio es escandalosamente más caro que el de cualquiera de nuestros competidores europeos. Como dijimos, en España más que un precio del cerdo parece que tengamos un “monumento al precio del cerdo”, en lo alto de un pedestal.
Hemos de reconocer (y no nos duelen prendas al hacerlo) que nuestra previsión de hace un mes afirmando que el precio bajaría ha resultado errónea. La bajada no ha aparecido ni se la espera. Los mataderos españoles no hacen milagros pero casi. Alguien debería, algún día, escribir la historia y los entresijos de los mataderos porcinos en España.
Alemania y sus mercados satélites (países limítrofes: Bélgica, Holanda, Dinamarca) llevan semanas repitiendo (Bélgica subió un poco desde la cola del pelotón) en una demostración palpable de que su mercado está en equilibrio.
Sabemos que este año es atípico donde los haya; la pandemia ha trastocado completamente los hábitos de consumo y los flujos turísticos (para desgracia de los países de la ribera del Mediterráneo). El consumo veraniego de los países del sur de Europa es mucho menor de lo normal; los países expendedores de turistas han visto como muchos preferían vacaciones de proximidad y sus consumos no se han resentido del clásico vacío veraniego.
China sigue su marcha comercial comprando en la Unión Europea las cantidades suficientes para que no se acumulen stocks excesivos; el flujo constante hacia China es el factor que mas influye y determina los mercados europeos.
En nuestro mercado coexisten fuerzas antagónicas, todas muy poderosas:
- A favor de que el precio baje está la enorme diferencia con nuestros vecinos, Europa entera tiene precios de la carne acordes con el nivel de compra de Alemania u Holanda, no tan concordantes con el precio del porcino en España.
- En contra de que el precio baje está la limitada oferta en vivo, la meteorología por un lado y la demanda ampliada por otro.
Querámoslo o no el mercado está en equilibrio; todos los operadores con los que hemos hablado opinan que el movimiento que alterará este equilibrio será de subida. Tradicionalmente los cerdos bajan en Septiembre en España por aquello de que recuperan los retrasos veraniegos y la oferta crece tangiblemente. No parece que esta oferta ampliada (comparada con la de agosto) pueda cubrir la, por ahora, perenne falta de ganado para sacrificio.
Se perfila otro año histórico para los ganaderos. Y van...
Terminaremos hoy con dos frases célebres muy indicadas para meditar:
La salud es la unidad que da valor a todos los ceros de la vida (Bernard le Bouvier de Fonterelle).
Aquel que quiere, permanentemente “llegar más alto” tiene que contar con que algún día le invadirá el vértigo (Milan Kundera).
Guillem Burset