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Introducción
Los registros de rendimiento de las cerdas son importantes para la evaluación y monitorización de los niveles de producción comerciales. Los productores tienen como objetivo destetar un gran número de lechones por camada, aumentando el número de lechones nacidos vivos, reduciendo el número de nacidos muertos y maximizando la supervivencia de los lechones en la maternidad. El objetivo de este estudio fue evaluar la relación entre los pesos al destete de los lechones y los caracteres de supervivencia con el número de lechones amamantados en camadas de raza pura y cruzadas.
Métodos
Se analizaron datos de productores de cerdos de raza pura en Estados Unidos:
| Raza | Número de camadas |
| Duroc | 29.297 |
| Landrace | 34.177 |
| Yorkshire | 40.301 |
| Macho Yorkshire x hembra Landrace | 8.061 |
| Macho Landrace x hembra Yorkshire | 4.028 |
Los caractres reproductivos analizados fueron:
- Número de lechones nacidos vivos
- Peso de la camada al parto
- Número de lechones tras las adopciones (NTA)
- Número de lechones destetados (ND)
- Porcentaje de supervivencia pre-destete (calculado como ND/NTA x 100)
- Peso de la camada al destete (PCD) (sólo lechones vivos)
- Peso medio del lechón destetado (calculado como PCD/ND)
- Los pesos al destete se ajustaron a 21 días de edad
Los datos se distribuyeron en 4 períodos de tiempo de 1986 a 1997, de 1998 a 2002, de 2003 a 2008 y de 2009 a 2011. Tras el análisis inicial se observóque el período 1 y 2, así como el período 3 y 4, no fueron significativamente diferentes y se combinaronen 2 períodos de tiempo de 1986 a 2002 y de 2003 a 2011.
Resultados
Las resultados medios por raza se resumen en la tabla 1.
Tabla 1. Medias y desviaciones standar (SD) de los caracteres reproductivos por raza o cruce.
| Carácter | Duroc | Landrace | Yorkshire x Landrace |
Landrace x Yorkshire |
Yorkshire | Media global |
| Peso de la camada al destete | 50,4 (12,8) |
65,6 (13,6) |
69,3 (11,0) |
62,3 (14,9) |
66,4 (14,9) |
59,57 |
| Peso medio del lechón al destete | 6,3 (1,2) |
6,8 (1,1) |
7,0 (0,6) |
6,6 (1,2) |
6,7 (1,1) |
6,51 |
| Número de lechones nacidos vivos | 9,1 (2,2) |
10,6 (2,7) |
10,9 (2,7) |
10,7 (2,8) |
10,6 (2,9) |
10,20 |
| Peso de la camada al parto | 15,5 (3,8) |
17,8 (4,3) |
15,8 (3,6) |
16,9 (4,4) |
16,3 (4,2) |
16,51 |
| Supervivencia en maternidad % | 90,8 (12,0) |
91,7 (10,5) |
91,9 (9,8) |
90,9 (11,6) |
91,4 (11,6) |
91,2 |
| Número de lechones nacidos | 10,0 (2,3) |
11,4 (2,8) |
11,8 (2,9) |
11,6 (3,0) |
11,6 (3,0) |
11,06 |
Otros datos medios globales son 9,18 lechones destetados por camada y 1,64 kg de peso al nacimiento por lechón.
Para ambos períodos, el número de destetados para camadas más pequeñas (menos de 10 cerdos después de las adopciones) no fue significativamente diferente entre razas (Figura 1, P>0,05). A medida que el número de lechones después de los traspasos aumentaba, el número de lechones destetados de madres Landrace y Yorkshire fue mayor (P<0.05) que en las camadas Duroc. El número máximo de lechones destetados en el período 2 (Figura 1B) llegó a 15 lechones después de los traspasos para todas las razas (9,68 para Duroc, 11,18 para Landrace y 10,89 para Yorkshire).
Figura 1. Relación entre el número de lechones tras los traspasos y el número de destetados [1986 to 2002(A); 2003-2011 (B)] por raza.
La supervivencia en paridera varió de casi el 100% (número de lechones tras las adopciones = 5) al 59,5% para la raza Duroc (número de lechones tras las adopciones = 16) (Figura 2A). La supervivencia de los lechones en maternidad disminuyó de manera lineal al aumentar el número de lechones tras los traspasos y lo hizo de forma más pronunciada por encima de 11. Las camadas del segundo parto tuvieron mayores tasas de supervivencia (P<0,05) y a medida que aumentaba el número de partos, la supervivencia disminuía (Figura 2B). Estos resultados coinciden con estudios previos de Cecchinato et al. (2010) que tambien encontraron una mayor supervivencia en cerdas de segundo parto con una disminución de la misma en partos posteriores, tanto en camadas de raza pura como cruzadas.
Figura 2. Efecto del número de lechones tras las adopciones (A) y el orden de parto (B) en la supervicencia por raza.
Varios factores afectaron al peso medio al destete, entre ellos la raza de la cerda, el número de lechones tras los traspasos, el período de tiempo y la edad al parto (Figura 3). A medida que aumentaba el número de lechones después de los traspasos, los pesos medios al destete disminuyeron de una manera lineal. Los cerdos de camadas Landrace (6,84 kg) fueron más pesados que los Duroc (6,16 kg) y Yorkshire (6,48 kg) (P<0,05).
Figura 3. Efecto del nº de lechones tras las adopciones (NAT) [1986 hasta 2002 (A), 2003 hasta 2011 (B)] u orden de parto [1986 hasta 2002 (C); 2003 hasta 2011 (D)] en el peso al destete por raza.
Las camadas cruzadas Yorkshire-Landrace tuvieron mayores pesos al destete, por camada y por lechón, que las de raza pura Yorkshire y Landrace (P<0,05). Las camadas cruzadas mostraron aproximadamente un 11,6% de heterosis en el peso al destete de la camada y un 9,1% en el peso al destete del lechón.
Discusión
La supervivencia de los lechones es el resultado de interacciones muy complejas entre los lechones, la cerda y el ambiente de cría (Edwards, 2002). El aumento de la supervivencia de los lechones hasta el destete, cuando se destetan 13 o más lechones, requiere una combinación de cambios tanto a nivel de selección genética como de manejo. Se ha sugerido la selección para aumentar el peso al nacimiento del lechón y disminuir la variabilidad del peso de la camada al parto (Knol et al., 2010). El componente materno del peso al nacimiento del lechón tiene una heredabilidad aproximada de un 15%. El peso al nacimientodel lechón como efecto directo es sólo un 4% heredable. La selección para aumentar el peso medio al nacimiento del lechón en relación al número total de lechones nacidos tiene potencial para aumentar la capacidad uterina. La variación del peso al nacimiento del lechón dentro de la camada es menos heredable (del 5 al 8%) y será más difícil conseguir progreso genético. El uso de información genómica para la selección de machos jóvenes en las líneas maternas incrementará la tasa de progreso genético para estos caracteres. Si bien el peso al nacimiento del lechón es el factor que más influye en la supervivencia, otros factores de comportamiento como la vitalidad y el vigor de los lechones al nacer también contribuyen a la probabilidad total de supervivencia de las crías (Baxter et al, 2010;. 2013). La capacidad materna, la capacidad de la cerda para cuidar de sus lechones es heredable y puede responder a la selección. Estas característicasde vitalidad y vigor se deben a efectos genéticos directos y se pueden seleccionar tanto en líneas maternas como líneas paternas terminales.
Ha habido un aumento del número de nacidos vivos y el resultado es un aumento tanto del número de destetados como de la mortalidad pre-destete (Knauer y Hostetler, 2013). Al aumentar el tamaño de la camada, aumenta la proporción de lechones de bajo peso al nacimiento y al destete, lo que resulta en más cerdos con menor robustez a largo plazo (Rutherford et al., 2013). Con la selección para aumentar el número de lechones nacidos vivos por camada, lo que resulta en un mayor número de cerdas que crían de 12 a 14 lechones, se debe poner mayor énfasis sobre la supervivencia pre-destete en el objetivo de selección. Los lechones de bajo peso tienen menos reservas de energía y menor capacidad para mantener la temperatura corporal inmediatamente después de nacer. Así que hay que considerar un manejo más intenso, que incluya un aumento de la temperatura en paridera (de 24 a 25ºC), el secado de los lechones recién nacidos, el uso de amamantamiento fraccionado, cajas calientes y suplementación con calostro.
El aumento del tamaño de la camada puede resultar en una reducción del rendimiento de los lechones después del destete. Los cerdos con más peso al destete tienden a crecer más rápido (Lawlor et al., 2002) que sus homólogos de menor peso. Los cerdos de peso más bajo al nacimiento y al destete tienden a crecer más lentamente, a ser menos eficientes en la alimentación, a tener una ligera disminución del porcentaje de magro de la canal y una mayor tasa de mortalidad desde el destete hasta el sacrificio que los cerdos más pesados al nacimiento y al destete (Fix et al., 2010a, b ; Schinckel et al, 2009;. 2010).
Conclusiones
Es importante que se evalúen las relaciones entre los caracteres reproductivos y factores como el orden de parto, el cruce de razas y el número de lechones después de los traspasos para perfeccionar las prácticas de selección y manejo. El número de lechones nacidos vivos se ha mejorado a través de la selección genética. Se debe poner mayor énfasis en las estrategias de manejo y de mejora genética para aumentar la supervivencia pre-destete (Knol et al., 2010).
