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Fiel a su ineludible cita alcista con la primavera, la cotización española ha aumentado en las seis ultimas sesiones de Mercolleida. El panorama es conocido: se presiente el verano y los cerdos en España suben.
En el Sur y el Levante la oferta en vivo flaquea más de lo normal y los mataderos de esas zonas drenan la oferta catalano-aragonesa más fluida. Este es un primer factor de firmeza.
Al revés que en otros años, Europa (sus mercados principales) se ha apuntado sin complejos a este movimiento alcista, lo que facilita en parte la labor del matadero español en su trabajo de exportación. Este es un segundo factor que ayuda.
El Euro muestra una gran debilidad y semana tras semana se deprecia con relación al US$ y las demás divisas internacionales. Las exportaciones europeas han recuperado competitividad a pasos agigantados y se nota que exportar a terceros países es mas fácil y sencillo. Este es un tercer factor que consolida.
Las dos piezas nobles por excelencia de la canal porcina (los jamones y los lomos) han reaccionado abandonando los misérrimos (históricamente misérrimos) precios en los que llevaban meses anclados. El jamón de exportación se vende bien y cómodamente y los lomos han estado tanto tiempo tan baratos que probablemente han recuperado atractivo en mercados donde habían sido sustituidos por otras carnes.
Seis sesiones alcistas podrían haber desatado inquietud en los mataderos, tensiones insoportables en el mercado, inseguridad e incertidumbre. Nada de eso aparece por el momento. El segundo y el tercer factor reseñados en los párrafos precedentes han ayudado a levantar ventas y precios a los mataderos que resisten mejor que otros años.
Creemos que queda recorrido, el mercado no desfallecerá en junio y la llegada del calor –recurrente pero persistente y sólido argumento- ayudará. No esperamos precios de récord pero sí firmeza garantizada para todo el mes a pesar del festivo del día 24.
Resulta imposible evaluar el verdadero impacto de la crisis en nuestros mercados (el impacto presente y el futuro). Mucho nos tememos que las tribulaciones españolas están lejos de terminar y con el bolsillo vacío el consumo podría fácilmente preferir proteína de leguminosa a la proteína porcina. El consumo interno representa más de un 70% de la producción estatal, con lo que su relevancia es manifiesta.
Veremos, veremos, veremos.
John Kenneth Galbraith: “Si no piensas en tu futuro no lo tendrás”.
 Guillem Burset |
