0
Para las personas el acto de comer no es sólo nutricional sino también social. A pesar de que pueda parecer lo contrario, los cerdos muestran un cierto comportamiento social al comer, como ya hemos reflejado en el capitulo anterior. A los cerdos les gusta comer acompañados y, si bien no “cierran negocios” comiendo, el mal acceso a la comida origina peleas en el corral en muchas ocasiones.
3.1. Comer para crecer
Hecho el apunte “social” de la comida, no podemos olvidar que el cerdo que está en el engorde o cebo, es decir en crecimiento, come para mantenerse, crecer y garantizar su actividad al mismo tiempo que regula la temperatura. Mantenerse será la primera necesidad que intentará cubrir cualquier ser vivo al comer, esto se debe a que por el mero hecho de vivir existen una serie de funciones que “gastan” energía. Para cerdos en periodo de crecimiento con un consumo normal de una dieta apropiada, las necesidades de mantenimiento son aproximadamente el 30% de toda la comida consumida. Es decir, sólo el 70% de lo que ingiere va destinado crecer. Sin embargo, cuanto menos crece un animal, mayor es el porcentaje del pienso que ingiere dedicado al mantenimiento, hasta que llega un punto en que, si tan malo es su crecimiento, puede no ser rentable tener a ese cerdo en la explotación, porque gasta prácticamente todo el pienso que ingiere en mantenimiento y destina una parte muy pequeña a crecer. Así pues, los crecimientos rápidos reducen la proporción de alimento necesario para mantenimiento (en general, a mayor ganancia diaria, menor índice de conversión).
Una vez las necesidades de mantenimiento ya han sido cubiertas, la mayor parte del resto del pienso ingerido en fase de crecimiento se destinará a crecer.
Este crecimiento será mayor o menor en función del destino de los nutrientes ingeridos ya que no todos los tejidos se producen con la misma eficacia. Si los nutrientes se destinan a la producción de músculo, éste será muy eficiente y rápido; por el contrario, si lo que se deposita es mayoritariamente grasa, el aumento de peso será mucho menor para la misma cantidad de pienso ingerida. Esto es así porque para depositar un kg de grasa se necesita 3 veces más de energía que para depositar un kg de músculo.
Figura 1. Orden de maduración de diferentes tejidos
El crecimiento de los animales es diferenciado, es decir, la velocidad de desarrollo o maduración de los tejidos depende de la edad (figura 1). Primero se produce el crecimiento del sistema nervioso, seguido de los huesos, posteriormente los músculos y finalmente se deposita grasa. Así, la edad determinará, para un mismo tipo de animal, la eficacia de aprovechamiento del pienso y puesto que la cantidad a ingerir es limitada, también la velocidad de crecimiento del animal (figura 2).
Figura 2. Curva de crecimiento del cerdo
Por esto los que estamos en edad adulta ya no crecemos en altura y lo hacemos en anchura.
Si consideramos los sexos, observamos que los crecimientos mayores se dan en los machos enteros, les siguen las hembras y finalmente los machos castrados.
No cabe duda que los objetivos que nos marcaremos en el cebo será el crecimiento del animal en el mínimo tiempo posible y al menor coste posible (los dos factores son traducibles directamente en dinero).
3.2. Factores que influyen en la obtención de los objetivos marcados
Hay muchos factores que pueden favorecer o impedir la consecución de los objetivos marcados. Algunos de ellos no dependerán directamente del manejo en granja, entraremos en su discusión más adelante en otros capítulos. Conseguir una mejor calidad de canal y de carne depende de factores no ligados al manejo como son el tipo de cerdo (ligado a la empresa de genética suministradora), la dieta (calidad en energía y proteína, presentación, ...), el sexo (hembras, machos y castrados),etc. Hablaremos básicamente de aquellos factores que afectarán a los dos primeros objetivos: engordar los cerdos con el menor tiempo posible y al menor coste.
Sólo conseguiremos estos objetivos, si tenemos:
- Animales sanos.
- Un buen crecimiento diario.
- Una eficiente transformación del pienso.
Para conseguir estos objetivos será necesario un correcto funcionamiento de todos los factores que influyen en el consumo, como son, los ambientales (temperatura, humedad y velocidad de aire), los físicos que demos al animal (densidad de ocupación, comedero, ...), los fisiológicos (sanidad, edad, sexo, genética, ...), los nutricionales (agua, cantidad-calidad de la dieta, presentación del pienso, aditivos, …) y finalmente los sociales (grupo, mezclas).
Tabla 1 Factores que influyen en el consumo voluntario o apetito de los cerdos.
| Factores ambientales | Factores físicos |
| Temperatura Humedad Velocidad del aire |
Densidad Tamaño del comedero Número de comederos |
| Factores fisiológicos | Factores nutricionales |
| Sanidad Edad y peso vivo Genotipo Capacidad gastrointestinal Sexo |
Volumen de la dieta Densidad de nutrientes Ingredientes Aditivos Contaminantes Presentación del pienso Ingesta de agua |
| Factores sociales | |
| Tamaño del grupo Reagrupamiento o mezcla de lotes |
Fuente: Quiles, A. Departamento de Producción Animal. Universidad de Murcia.