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En las ultimas sesiones de Mercolleida hemos asistido a una serie de subidas consecutivas, todas de muy poca entidad pero bastante significativas en su conjunto. En total, se han acumulado alzas de 3,7 céntimos en vivo que equivaldrían a unos 4,8 céntimos en kilo canal.
Este comportamiento del mercado español no ha corrido en paralelo con lo acontecido en Europa, donde la continuidad se impuso en las semanas 45 y 46; en la semana 47 se constataron bajas de unos 0,03 € / kilo canal en los mercados más significativos (Alemania, Bélgica, Holanda, Francia).
Hoy lunes, día 24 de noviembre el mercado alemán ha ofrecido una baja de 2 céntimos de euro; el holandés también baja - 3 céntimos el kilo canal en este caso-.
Aquí y ahora se nos antoja que esta pérdida de competitividad de las canales españolas y sus despieces acarreará grandes dosis de tensión. No cabe duda que las subidas acumuladas en nuestro mercado se han conseguido arañando el margen del matadero (imposibilidad total de repercutir alza alguna en las carnes) lo que podría provocar una rápida desmotivación en lo que concierne a mantener las elevadas matanzas de las últimas semanas.
Si bien ha quedado demostrado que en el período estival España puede manejar unos precios del ganado superiores a las horquillas europeas, no nos parece que la antesala de Navidades sea una época que permita tal comportamiento. El mercado europeo aparece completamente saturado, a pesar de la demanda navideña que algunos operadores ya han cubierto. En cualquier caso, las próximas sesiones de Mercolleida prometen ser muy disputadas.
Globalmente, la impresión de mercado que manifiestan grandes operadores europeos es bastante pesimista: las exportaciones de la CEE hacia países terceros continuan al ralentí (el euro es caro en relación al dólar, la oferta mundial abundante) y la oferta de ganado continua siendo importante, sobretodo en Alemania y Francia.
La opinión más extendida en Europa es que la pesadez del mercado continuará hasta el cambio de año como mínimo, con una eventual reacción al alza cuando acabe el invierno, en función de la caída de oferta que aparezca.
No queda espacio para el optimismo a corto plazo.
Guillem Burset
Grup Unexporc
