A pesar de su aparente simplicidad, la nave de cubrición control dispone de elementos suficientes para que se le dedique tiempo en valorar las ventajas e inconvenientes de unos y otros.
En el primer artículo sobre esta nave debatimos con los técnicos Javier Lorente, Lluís Ferrer y Joan Aparicio temas relacionados con su diseño. En este artículo abordaremos elementos más concretos.
Alimentación
Cada vez se le da más importancia a la alimentación en el período desde el destete hasta la salida en celo. La recomendación más habitual es proporcionar un alto nivel de alimentación a las cerdas durante estos días con el objetivo de favorecer la salida en celo, y una buena ovulación que resulte en una elevada prolificidad en el siguiente parto.
Otra cuestión es que sea fácil hacer bien esta alimentación ya que en estos días las cerdas comen de forma muy dispar. Es por ello que este tema suscita cierto debate. Lorente recomienda que el área de detección de celo (ADC) tenga un circuito de alimentación distinto para que se pueda dar un pienso específico para esta fase o incluso poder dar una comida adicional entre el destete y la cubrición.
Para Aparicio proporcionar una alimentación diferente a las cerdas en la fase destete-cubrición es también fundamental. Él recomienda que en esta zona haya doble silo y que los dosificadores tengan doble entrada de alimentación para poder dar piensos distintos.
Ferrer dice que, aunque no es algo que se encuentre en las granjas, un sistema de alimentación a voluntad tipo tolva de bola podría ser práctico durante estos días (Foto 1).
Comederos
Para Aparicio el mejor sistema es el que se ha impuesto en general en los últimos años: comederos corridos. Funcionan sin chupete, y normalmente mediante un sistema de nivel de agua constante normalmente controlado por una boya o válvula de nivel.
Aunque está de acuerdo, Ferrer opina que en demasiadas ocasiones el comedero corrido se combina con un nivel de agua excesivo. Esto provoca que el pienso se desplace con el agua, y no se consiga individualizar la alimentación como sería imprescindible en esta fase. Y recuerda que el comedero corrido a diferencia del comedero individual no garantiza al 100% que cada cerda coma su ración ya que algunas cerdas pueden “robar” pienso de sus vecinas. Por ello es importante agrupar las cerdas por condición corporal con este tipo de comedero.
Jaula y tipo de suelo
Para Lorente, lo más importante es que las jaulas en esta zona no tengan barrotes encima. “Soy partidario se estimular mucho a la cerda antes de la inseminación, incluso poder entrar en la jaula si hace falta. Por ello no deben haber barrotes encima” (Foto 2)
En el mercado encontramos jaulas con puerta solo trasera y otras con puerta delantera y trasera.
Los 3 autores coinciden en que es mejor puerta trasera únicamente. Las puertas delanteras en demasiadas ocasiones tienen cierres que se abren con facilidad provocando la presencia de cerdas sueltas por la granja. Para JA, es básico que la puerta trasera se abra con facilidad.
Respecto al suelo, lo más común es tener una parte solida en la parte frontal de la cerda y luego slat de hormigón en la parte trasera para mantener a la cerda más limpia.
Lorente explica que es importante que el slat sea progresivo, aumentando el espacio entre las costillas desde la zona frontal a la trasera. Y que las costillas sean perpendiculares al eje de la cerda para que le permitan levantarse y acostarse mejor, sin resbalar. (Foto 3)
Luz
Constato que es un tema que genera cierto escepticismo… no hay duda de que las granjas deben tener buena luz. Si bien nos encontramos con recomendaciones de niveles altos de lux (150-200 lux encima de los ojos de la cerda) (Foto 4) hay pocas evidencias científicas al respecto.
Ferrer es, de nuevo, muy práctico, la luz adicional puede ser importante en algunas granjas pero ¿porque no aprovechamos más la luz solar?. Incide en que “no comprendo porque las cerdas se colocan de espaldas a las ventanas en muchas granjas. Si lo hiciésemos al revés no haría falta luz artificial durante muchas horas del día“.
Lorente, en la granja “ideal” aseguraría un buen nivel de luz a 1 metro de la cerda, pero para él no es el aspecto más determinante, aunque sí que debemos asegurar 14-16 horas de luz.
Ambiente
Para Ferrer el aislamiento en las naves de gestación es uno de los grandes olvidados. Dado que la cerda adulta resiste bien el frio, en muchas ocasiones no se evitan temperaturas bajas en invierno ocasionando cerdas delgadas, algo que repercute en un incremento del consumo de pienso.
No hay discusión entre los autores, el ambiente debe ser controlado, con sistemas de refrigeración para verano.
Lorente diferencia el diseño de la nave dependiendo de la zona: “En zonas muy calurosas son recomendables las naves altas y con volumen. En zonas frías menos volumen, y ventilación por falso techo.
En dos artículos consecutivos hemos desglosado el diseño y elementos de las naves de cubrición y control. El diseño y los elementos que escojamos tendrán influencia en aspectos tan importantes como la salida en celo, la fertilidad y prolificidad, así como en el tiempo que requieran las tareas de recela e inseminación que allí se realizan. Por ello es importante se dedique atención a las distintas posibilidades a la hora de diseñar estas naves.