El 19 de junio de este año aventuramos en esta misma sección que la media aritmética del precio de este año se situaría entre 1,24 y 1,26 €/Kg vivo. Pues bien, a fecha de hoy con el ejercicio prácticamente cerrado la media anual (aritmética, que no ponderada) se sitúa en 1,26 €/Kg vivo. Se mire como se mire un resultado extraordinario desde todos los puntos de vista.
Por otro lado, el 29 de septiembre aventuramos que el precio a final de año se situaría entre 1,04 y 1,10 €/Kg vivo. La ultima lonja de referencia en España del año (Mercolleida) cerró ayer a 1,015 €/Kg vivo. Patinazo o pecado de optimismo.
Finalizada la campaña navideña constatamos que la demanda de carne se desploma (como cada año por otra parte) y arrastra en su caída el precio del cerdo. Europa entera reposiciona sus cotizaciones a la baja. Alemania ha cedido 8 céntimos en dos semanas, Francia, Dinamarca, Holanda…. se mueven a su estela y descienden también. Parece que toda Europa mueve sus precios a la búsqueda desesperada de un suelo definitivo.
El total sacrificado en España en 2017 será un 0,50 % superior al del año pasado. Esta cifra es muy significativa si la comparamos con otros países de la UE y todavía lo es más si anotamos la serie de los últimos tres años: 2017 vs 2016 = 0,50 %; 2016 vs 2015 = 8 %; 2015 vs 2014 = 8 %. En la primera mitad de 2017 los sacrificios eran inferiores a los del año anterior pero a partir de septiembre la actividad se aceleró llegando a fin de año con este modesto 0,50 % de incremento.
Saldremos de fiestas con mucho ganado retrasado. Los mataderos han demostrado en estas últimas semanas que pueden llevar su actividad a récords absolutos. En enero será necesario sacrificar a tope para absorber los retrasos. Los pesos promedio en canal de esta semana son un 2 % superiores a los del año pasado en la misma fecha. El dato, en sí, indica que ya hay cerdos acumulados antes de los festivos.
Pensamos que en enero el cerdo bajará lo necesario para estimular al matadero a sacrificar como nunca. En los mercados internacionales debemos afrontar la dura competencia americana, beneficiada por un Euro un 14% más caro que hace un año (o un Dólar USA más barato).
Resistir, resistir y resistir. Esta es la consigna. Esperemos que las reducciones de cabaña en el norte de Europa nos permitan encontrar destinos nuevos y poco explorados para nuestra carne. Congelar para guardar o especular no parece todavía una opción aunque habrá que congelar por fuerza debido a la “ausencia del cliente en Navidades”.
Estamos en Navidades y es tiempo de Paz, Concordia y Amor. Disfrutemos de esta tregua en familia y aparquemos preocupaciones y dudas hasta enero. Relajemos nuestro espíritu y miremos de empaparnos de la esencia de la Navidad.
Felices Navidades y próspero Año Nuevo a todos.
Guillem Burset