No se encontró evidencia de depósitos anormales de priones que sugiriesen la presencia de EET. Se detectaron vacuolas aparentes en el neuropilo del colículo rostral en el 64 % de los cerebros y en el 15,4 % de las neuronas del núcleo dorsal vagal. Sin embargo, se han descrito lesiones similares en cerdos control en otros ensayos.
También se detectaron cambios relacionados con la edad, incluyendo esferoides en el núcleo funicular en un 24,5 % de los animales, depósitos de lipofusina en las neuronas trigeminales en el 13,75 % y depósitos minerales en las paredes de los vasos del núcleo dorsal vagal en un 0,6 %. Se observaron cambios inflamatorios leves no supurativos de origen desconocido en el 4 % de los animales.
H Jahns, JJ Callanan, DJ Sammin, MC McElroy, y HF Bassett. Survey for transmissible spongiform encephalopathies in Irish pigs fed meat and bone meal. 2006. The Veterinary Record 159:137-142