Para ello se utilizaron dos machos de 6 semanas de vida procedentes de 5 camadas (Landrace x Large White). Los animales fueron destetados a las 4 semanas de vida. Los lechones de cada camada se distribuyeron entre las dos dietas experimentales, la dieta control (contenido lisina: 1,16%) o la dieta baja en lisina (BL; 0,73%). Las dietas fueron preparadas para ser iso-energéticas e iso-proteicas y contenían los niveles de AA recomendados excepto para la lisina. Los lechones fueron alimentados con las dietas experimentales durante 3 semanas. Al final del estudio se recogieron muestras de los músculos L. dorsi y rhomboideus que fueron rápidamente diseccionados y divididos en porciones de 5g, congeladas con nitrógeno líquido y congeladas a -80ºC hasta el momento del análisis para la determinación de coactivador 1 alfa del receptor activado por proliferadores peroxisomales (PGC-1α), receptor activado por proliferadores peroxisomales γ2 (PPAR-2γ), y la GLUT4 mRNA. Asimismo se midió la actividad de la citrato-sintetasa (indicador de la capacidad oxidativa de la célula). También se determinaron los contenidos de glucógeno en estas muestras. Se recogieron también muestras de plasma que se mantuvieron congeladas a -20ºC para las determinaciones de aminoácidos libres.
Los niveles de lisina de la dieta no afectaron al consumo de pienso. El crecimiento de los lechones alimentados con las dietas BL tendió a ser menor respecto al de los animales que consumieron la dieta control (P=0,073), y el índice de conversión fue inferior para el grupo BL comparado con el grupo control (P<0,05). La actividad de la citrato-sintetasa en ambos músculos fue superior para los lechones del grupo BL comparado con los lechones del grupo control (P<0,05). El contenido de glicógeno en el músculo romboideo de los lechones alimentados con la dieta BL tendió a ser superior comparado con los animales del grupo control (P=,127), mientras que el nivel de lisina no produjo ningún efecto sobre le músculo longissimus. Como se esperaba, la concentración de lisina a nivel plasmático fue considerablemente menor en los lechones alimentados con la dieta BL (P<0,01). En el grupo BL las concentraciones de treonina, valina, isoleucina, fenilamina, histidina y arginina fueron superiores (P<0,05) y la metionina y la leucina tendieron a ser superiores (P=0,0852 y P=0,0917, respectivamente) mientras que por contra, los niveles de glutamato y glicina fueron inferiores (P<0,05). En ambos músculos los lechones alimentados con la dieta baja en lisina presentaron mayor proporción de fibra oxidativa que los alimentados con la dieta control (P<0.01). El nivel de mRNA de la GLUT4, PPAR-2γ, y PGC-1α fue superior en los músculos de los animales alimentados con la dieta BL (P 0,05) con la excepción de la GLUT4 (P = 0,1037) y PGC-1α (P = 0,5494) mRNAs en el músculo l. dorsi.
La reducción del nivel de lisina de la dieta mejoró la proporción de fibra oxidativas en el músculo y por tanto la capacidad oxidativa en el músculo porcino.
M Katsumata, M Matsumoto, S Kobayashi and Y Kaji. 2008. Journal of Animal Science. 79: 347-353.