0
Desde 1969 que no se ha detectado brucelosis en cerdos domésticos en Bélgica, sin embargo, en 1994 cepas de Brucella suis biovar 2 fueron aisladas de jabalíes cazados lo que demuestra la circulación de la bacteria entre los jabalíes (Sus scrofa) en las poblaciones de Bélgica. Desde entonces, B. suis biovar 2 se ha aislado de jabalís en varios países de Europa Central y Occidental, como Francia, Suiza, Alemania, España y Croacia.
Los objetivos de este estudio fueron, por un lado, determinar la seroprevalencia aparente de la brucelosis en jabalíes de las cuatro principales zonas de caza de Bélgica e identificar posibles factores de riesgo asociados con la seropositividad y por otro lado determinar la combinación más adecuada de pruebas de diagnóstico directas e indirectas.
En total, 641 de las 1168 muestras de suero fueron consideradas positivas mediante iELISA, dando una tasa de seroprevalencia aparente del 54,88% (IC 95%: 52,03-57,73). Se observó una diferencia significativa entre la seroprevalencia aparente en 1994 (39,7% con IC 95%: 31,64-47,79) y la seroprevalencia aparente global encontrada en este estudio (χ2 = 11.62, P <0,001, df 1). El modelo multivariado de regresión logística realizado mostró en los resultados de IELISA que el año de muestreo y la edad se asoció significativamente con la seropositividad. Por el contrario, el sexo no afectó. La seroprevalencia aparente tampoco se vio afectada ni por el mes de muestreo ni por la región.
Los resultados muestran que la brucelosis es endémica en los jabalíes del sur de Bélgica. Tanto la población de jabalíes como la prevalencia de la brucelosis se han incrementado entre 1994 y 2007, y esto constituye un riesgo cada vez mayor de que la enfermedad alcance a la población de cerdos domésticos criados en sistemas outdoor. Por razones económicas y prácticas, las pruebas serológicas son las primeras herramientas para su uso en estudios de prevalencia de la brucelosis en los jabalíes, pero éstos deben ser interpretados con precaución, y las pruebas ELISA utilizadas deben estar expresamente validadas para su uso en las especies silvestres. Además, se recomienda encarecidamente su asociación con herramientas para el diagnóstico directo. En el presente estudio, la PCR fue más sensible que el cultivo bajo las condiciones de toma de muestras en animales silvestres. El bazo y las tonsilas son los tejidos linfoides que por lo general se utilizan en los programas de monitoreo de múltiples enfermedades. Estos continúan siendo los mejores para el diagnóstico directo de la brucelosis, con una preferencia por las tonsilas.
Fabien Grégoire, Bénédicte Mousset, David Hanrez, Charles Michaux, Karl Walravens and Annick Linden. A serological and bacteriological survey of brucellosis in wild boar (Sus scrofa) in Belgium. BMC Veterinary Research 2012, 8:80 doi:10.1186/1746-6148-8-80