Las cerdas lactantes fueron divididas en 5 tratamientos: 1) control negativo, dieta baja en P sin fosfato añadido ni fitasa microbiana. 2), 3) y 4) eran la misma dieta pero suplementadas con 750, 1.000 ó 10.000 U/kg de fitasa respectivamente. La 5) fue un control positivo, la misma dieta que 1) con 1,5g/kg de P digestible en forma de fosfato monocálcico. Las gestantes recibieron los mismos tres primeros tratamientos y un control positivo suplementado con 1,0g/kg de P digestible. Las dietas negativas eran diferentes, la ratio Ca:P digestible se mantuvo constante a 2,9:1 y 3,3:1 en lactantes y gestantes respectivamente.
Se tomaron muestras de heces los días 15 y 21 post-destete y en los días 70 y 90 de gestación. La digestibilidad del fósforo se vió incrementada por la adición de fitasa, así como la de cenizas, Ca, Mg, Na, K, Cu y Zn. Se observó una correlación positiva entre la dosis de fitasa y la cantidad de P digestible liberado en las cerdas lactantes. No se observaron signos de efectos adversos de la fitasa ni en las cerdas ni en los lechones, ni a la dosis más alta.
Si los fosfatos de la dieta son parcialmente reemplazados por 750 U/kg de fitasa la excreción de P puede reducirse entre un 0,75-0,90kg por cerda y año.
AW Jongbloeda, JThM van Diepena, PA Kemmea y J Brozb. Efficacy of microbial phytase on mineral digestibility in diets for gestating and lactating sows. 2004. Livestock Production Science. 91(1-2):143-155